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Construir un Futuro de Bajas Emisiones con Madera Dura Térmicamente Modificada

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La industria de la construcción es responsable de cerca del 37% de las emisiones globales de CO₂ relacionadas con la energía (UNEP & Global ABC, 2022). Aunque gran parte de la atención se ha centrado en crear edificios energéticamente eficientes en su fase operativa, existe un reconocimiento creciente de que el carbono incorporado, las emisiones derivadas de la producción y el mantenimiento de los materiales de construcción, también debe abordarse. Este movimiento ha llevado a arquitectos y constructores a buscar cada vez más materiales naturales y duraderos que puedan almacenar carbono y resistir el paso del tiempo.

Una solución cada vez más reconocida es la madera dura térmicamente modificada, que mediante un tratamiento térmico sin el uso de productos químicos se vuelve más duradera, estable y resistente a la intemperie, siendo ideal para diseños de construcción con bajas emisiones. En TIMBRA Tech®, hemos comprobado cómo la combinación de madera dura y tecnología avanzada de modificación térmica puede ofrecer alto rendimiento y contribuir a los objetivos de desarrollo sostenible.

La madera es un material único en la construcción: es negativa en carbono en el momento de la cosecha, ya que almacena el CO₂ atmosférico capturado durante el crecimiento del árbol. Ese carbono permanece almacenado mientras el material esté en uso.
La durabilidad es fundamental para mantener este beneficio. La madera dura utilizada en exteriores, por ejemplo, puede durar de 10 a 20 años antes de necesitar reemplazo, y cada reemplazo implica nuevas emisiones derivadas de la cosecha, la fabricación y la instalación. Prolongar la vida útil reduce directamente la huella de carbono incorporado de un edificio a lo largo del tiempo.

La modificación térmica altera la estructura de la madera a nivel molecular mediante calor y vapor. El resultado es un material con mayor resistencia a la degradación biológica y mejor estabilidad dimensional, lo que lo hace adecuado para aplicaciones exteriores exigentes.
Existe una diferencia significativa en el rendimiento en términos de carbono entre la madera dura sin tratar y la madera térmicamente modificada. En entornos exteriores, la madera sin tratar probablemente requerirá al menos un reemplazo completo durante la vida útil de un edificio. La madera térmicamente modificada, en cambio, puede durar toda la vida útil del edificio e incluso más, con un mantenimiento mínimo.
Gracias a su vida útil prolongada, la madera térmicamente modificada reduce eficazmente el coste de carbono por año de servicio y disminuye las emisiones asociadas con la fabricación, el transporte y el mantenimiento.

Otra ventaja es que el proceso no implica el uso de productos químicos, lo que garantiza que la madera sea segura para su reutilización o valorización energética al final de su ciclo de vida. Esto está plenamente alineado con los principios de la economía circular, manteniendo los recursos en uso productivo durante el mayor tiempo posible y asegurando que los materiales se gestionen de forma que eviten daños ambientales.

Las líneas Timbra Advance, Timbra Performance y Timbra Excellence reúnen todas estas ventajas, ofreciendo a arquitectos, constructores y diseñadores soluciones en madera dura térmicamente modificada que combinan durabilidad, atractivo estético y sostenibilidad genuina, contribuyendo a un futuro de bajas emisiones.